¿Despertarme temprano es buena idea?
Yo desde que terminé la universidad he estado en el trabajo constante, ir y venir de poder despertarme temprano. Y digo que después de la universidad, porque de ahí hacia atrás cuando uno va a la escuela y suele entrar 7am, resulta “fácil” ser morning person, pues quieras o no debes pararte muy temprano para empezar tus actividades del día tal como está establecido.
Una creencia que me limita es que suelo pensar que no soy morning person y por ende levantarme temprano no va conmigo, con mi ADN, como mi personalidad, sin embargo, “lucho” con revertir esa creencia.
A partir de que “por obligación” no he tenido que levantarme temprano, debo admitir que me ha costado trabajo mantener el hábito, creo que principalmente porque cada tanto mi cabeza me juega en contra recordándome esa creencia y sosteniéndola con firmeza.
Sin embargo, por ciertos periodos de tiempo lo he logrado, en algún momento con el Club de las 5 de la mañana, otras entrando a algunos retos, al leer el libro «Mañanas milagrosas» y otras simplemente por decisión. De hecho, actualmente estoy nuevamente enfocada en hacer parte de mis hábitos y rutina el despertar temprano porque cuando lo he hecho, he comprobado los grandes beneficios que tiene y los cuales ahora te quiero compartir:
Mejora tu calidad de sueño
Uno pensaría que si vas a despertar temprano, tu sueño se alterará o afectará. Sin embargo, tener el hábito de despertar temprano creo que va de la mano de tener una rutina sana de sueño y descanso.
Cuando decides despertar temprano también debes analizar a qué hora deberás dormirte para tener las horas adecuadas de sueño y por ende logres un buen descanso.
Cuando comienzas a despertar temprano, al cerrar el día tu cuerpo ya te pide el descanso necesario y por eso mismo resulta en un sueño profundo y reparador.
Mejora tu productividad
Es curioso, pero al menos a mí me ha sucedido que cuando me despierto temprano en lugar de sentirme “sin energía”, me siento con mucha más de la regular.
Si bien los primeros días después de las primeras horas del día si llega un “bajón”, ya que tu cuerpo comienza a adaptarse al nuevo hábito ya no existirá ese bajón, pero sí se conservará esa energía alta.
Entonces, aunado a que estás despertando antes de lo regular y con ello puedes aprovechar más cada día y por ende impacta en tu productividad teniendo tiempo para realizar más actividades; dado que te sientes con más energía, también habrá un sentimiento de que estás más que lista para afrontar el día y estás dispuesta a todo.
Obtén “tiempo extra”
Muchas veces decimos que no hacemos algo porque “no tenemos tiempo”. Así que despertar temprano es sumarle horas a tu día, ya sea para hacer aquello que antes no has tenido tiempo de hacer o para incorporar nuevos hábitos o actividades.
Cada persona decide qué hacer con ese tiempo extra, pero sin duda, si que cae bien sumarle horas al día para hacer aquello que deseamos, para sentir que pudimos aprovechar mejor nuestro día, para probar cosas nuevas que nos sumen.
Disfruta del silencio
En general en el día son pocos los momentos que podemos disfrutar del silencio porque una vez que salimos de casa hay muchos estímulos en el entorno que inquietan a nuestra mente. O incluso quedándonos en casa nosotras mismas rompemos con el silencio al poner música, encender la tele, platicar con quien vivimos, entre otras cosas.
Entonces despertar temprano e idealmente antes de que los demás en casa se despierten es permitirnos dedicar tiempo a disfrutar de la quietud y silencio (que puede ir desde algunos minutos hasta incluso algunas horas) con silencio absoluto.
Es entonces que puedes aprovechar esos momentos para meditar, para hacer journaling, visualización, para tus morning pages o para simplemente estar en calma y sintonía con el silencio o si comienzan a sonar algunos ruidos externos como de ciertos autos, aves, algún vecino a la distancia, te permitas disfrutar todo ello, con atención plena solo en ese instante, sin otro ruido en tu cabeza.
Contempla amaneceres mágicos
De lo que a mí más me gusta cuando me despierto temprano es tener la posibilidad de contemplar el amanecer.
Los amaneceres y atardeceres me conectan mucho con el mundo de posibilidades y magia ante el que estamos. Entonces, cuando estoy despierta temprano incluso antes de que haya luz de día, me emociona ver cómo poco a poco va apareciendo la luz y en el proceso el cielo se va llenando de muchos colores.
Para mí también ese momento es buenísimo para hacer reflexiones, visualizaciones, para profundizar en mi y mi vida, para disfrutar del silencio acompañado de la salida del sol.
Crea una rutina matutina
Una de las mejores formas de aprovechar que vamos a adquirir el hábito de despertar temprano es que esas horas adicionales que nos estamos regalando sean para crear una rutina matutina que nos nutra, enriquezca o aporte algo a nuestros días.
Cada una puede elegir en qué aprovechará este tiempo, pero crear una rutina nos ayuda a sostener en el tiempo este hábito, porque tenemos claro que nos despertamos temprano por una razón o varias razones tan específicas como poderosas.
Entonces, si estás por comenzar a despertarte más temprano de lo regular, determina cuál será tu rutina matutina y así al despertar podrás sentir que está siendo de mucha utilidad ese tiempo.
Haz cosas “solo para ti”
Esta rutina matutina que establezcas estará buenísimo que incluya cosas solo para ti.
Yo al vivir sola quizás es fácil que defina acciones que sean para mí, pero créeme que también si vives con tu pareja o tienes hijos, puedes definir una rutina matutina con actividades para ti si eliges despertar antes de que los demás en casa lo hagan y no tiene que ser muchas horas antes, puedes comenzar con algunos minutos e ir sumando tiempo si ves los beneficios que tiene en tus días.
Elegir actividades para ti viene de la mano de todas esas acciones que muchas veces hemos dicho que no tenemos tiempo de hacer. Entonces puedes comenzar a incorporar a tu vida el ejercicio, una rutina de skincare, meditar, leer, escuchar un podcast o audiolibro, journaling, visualización, morning pages, realizar un ritual de agradecimientos, planear el día, practicar yoga o salir a caminar. Estos son solo algunos ejemplos que vienen de mi propia experiencia y preferencias, pero tú puedes elegir aquellas actividades que conectan contigo y te emocionará realizar.
Y cuéntame, ¿tú te despiertas temprano?, si es así, ¿qué otros beneficios has descubierto? O si hasta ahora no sueles despertar temprano pero con lo que te he compartido vas a comenzar a hacerlo, después cuéntame qué te está pareciendo.